jueves, 2 de julio de 2009

Venganza


Con suma gallardía y audacia, la muchacha se despojó de sus ropas una a una al ritmo de la música. Contorneaba su cuerpo de acuerdo a la candencia de los compases enarbolando así los ánimos de aquel enamorado sentado enfrente como único espectador. Él, sumido en el embeleso, mordía sus propios labios para contener el éxtasis que esa mujer le proporcionaba. Deseaba tocarla, retenerla, besarla por cada centímetro de su piel canela pero prefirió esperar hasta el final. Nada se comparaba ante la expectativa disfrazada de tortura antes del primer beso, de la primera caricia o del primer embiste.


Desinhibida, resuelta y agresiva; ella se movía ondulante como si esquivara el aire. Su columna vertebral serpenteaba agraciada, jugando con el encaje de su ropa interior al igual que una araña entre su tela. La línea de su cuello invitaba a ser mordido, la curvatura de sus senos insinuaban oleadas de placer irrefrenable, como también el grosor de sus labios, hechos a mano para ser besados. El hombre que presenciaba aquel exquisito castigo, ya no soportaba su corbata anudada teniendo que aflojarla para respirar mejor. Ella le sonrió. Él perdió la cordura.


Como un juego excitante, la chica le amarró las manos a la silla Luis XV donde éste reposaba. Con la misma suavidad del satín, ella le acarició la boca con su lengua para luego cegarlo con un velo oscuro sobre los ojos. Lo besó intensamente bebiendo de él hasta el último aliento de sus pulmones. Teniéndolo a su merced, ella se sentó en su regazo de forma delicada y sugerente. De inmediato lo sintió estremecer bajo sus glúteos. Un ronco gemido reemplazó la melodía y la mujer se volteó para murmurarle al oído.


- Ahora ya ves lo que puede hacer la ex gorda de secundaria… si es que aún me recuerdas- y sin darle tiempo de replicarle nada, le rodeó el cuello con una cuerda que guardaba en el celo de su cartera negra.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Dios!!
O.o
I...
entré, leí y me quedé sin habla.

AnDRo dijo...

Gaby,
Gracias por pasar por aquí.
Si te dejé sin habla de una forma positiva, me alegro de haberlo logrado. Esa es la intención que se busca a la hora de inventar una nueva locura.
Un beso enorme! :)

Anónimo dijo...

Por supuesto que genial... xD
aún sigo sin habla...perdona
es que ese final fue tan sorpresivo e inesperado que....DIOS

CecilB dijo...

jajaja estuvo divertido el final y excitante el durante =)
Igual hay q ser rencorosa para querer matar a alguien por llamarte gorda alguna vez xD Aunq q las habrá seguro las hay

Patu dijo...

Tal vez no solo la llamó gorda... Tal vez la había rechazado su amor imposible.