miércoles, 4 de diciembre de 2013

Regalos suicidas



Hoy encontré algunos regalos de navidad que me habías obsequiado en el pasado, ese pasado que me abofetea la cara cada vez que me levanto de la cama. Estaban en mi habitación, sí, en alguna parte que no vi y que ahora saltan histéricos y trepan por mis paredes como seres de otro mundo. Uno de ellos se ahorcó, otro se encendió fuego y quiso quemarse a lo bonzo. Traté de salvarlos y con el último me lastimé las manos. Me recriminé la estúpida insistencia por rescatarlos, por querer mantenerlos creyendo con eso todavía te conservo. Quizás los regalos tienen una ordenanza tuya para auto aniquilarse, para desaparecer de mi vida y así no dejar rastro alguno de tu existencia. Si será así de bestial y sanguinario, entonces me alegro mucho de que nunca me regalaras un perro o un gato. 

2 comentarios:

JM Sánchez dijo...

Los malos recuerdos son así, Andrómeda, pero qué bien sabes retratarlos. ¿No has pensado en escribir en certámenes de micro? Yo escribo regularmente en:

http://estanochetecuento.blogspot.com.es/

y en

http://escueladeescritores.com/concurso-cadena-ser/

AnDRóMeDa dijo...

Gracias por leerme y por la sugerencia, JuanMa, entraré a los enlaces que me enviaste para conocerlos y mandar algo pronto.
Un besote!