domingo, 24 de enero de 2010

De la infancia


Siempre llega el día en que el cariño olvidado o descuidado vuelve con escándalo al corazón. Miles de recuerdos de infancia me persiguen y yo no hago nada por escapar, me gusta que me asalten pero a la vez me abruman y necesito un orden. Hoy es un domingo caluroso, de esos domingos que nos hace desear nubes y brisa para descansar en la cama, arropados, viendo una película; pero no, es verano y me obliga a inquietarme… a estar atenta.


Sobre los recuerdos de infancia debo decir que me hacen sentir más vieja, a pesar de mis veintiséis otoños en el cuerpo. Varios rostros se me vienen a la mente y sonrío como una niña de once años. Algo ocurrió para que se desatara esta locura de imágenes y colores… algo que hace temblar el piso y te grita a los oídos que has sido desconsiderada, olvidadiza. Nunca se deben olvidar a los amigos de la infancia.


Hoy murió la madre de uno de ellos. Se vertieron sobre mí esos sentimientos, esas emociones, esos innumerables abrazos brindados con los años. El rostro de aquella mujer me invade, el rostro de mi amigo en todos sus cambios me rodea: su rostro de niño, su rostro de adolescente, su rostro del hombre que es ahora y que vi crecer a mi lado. ¿Qué decir cuando el silencio de la distancia nos robó las palabras? ¿Qué hacer cuando no hiciste nada por evitarlo? ¿Cómo abrazarlo?


Espero que el calor no sea déspota con sus lágrimas. Espero que el sol no me haga fruncir el ceño cuando lo único que quiero es reflejar la pena que siento. Quiero borrar la lejanía entre nosotros y volver a tener los once años que tenía cuando nos conocimos… después de todo, son los niños los que saben cómo consolar sin hablar.

6 comentarios:

Erimarte dijo...

Que lindo!! :)

Anónimo dijo...

Negra, Gracia por describir lo que siento en estos momentos, la lejanía fisica en estos momentos me abruma al no poder estar junto a ustedes en este momento tan doloroso para un amigo y tratar de consolarlo, pero no es posible ningún consuelo que valga cuando se trata de una madre.

cuidate y saludos desde el frío cerro.

Patu dijo...

Si voy a ser sincera, este no me gustó tanto como otros que escribiste, pero muy lindo igual.

Adorador de Dios Espíritu Santo. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Adorador de Dios Espíritu Santo. dijo...

Eso me hizo soñar con voces, sentimientos, colores, aromas, y luces del pasado, gracias Andrómeda.

espléndidas dijo...

Lo siento mucho!! Mucha fuerza