Había
dejado las ventanas abiertas y algunas fotos de su muralla habían escapado. Tanto
que las trató de retener allí, orgullosas, brillantes, fieles, que en un solo descuido
se filtraron fuera de su vida como agua en un canal. Tal vez se sentían
prisioneras, tal vez no eran felices inmortalizando momentos pasados y
decidieron emprender su rumbo hacia otros mucho más importantes, más
significativos. La joven miró los espacios vacíos que quedaron en su muro un
buen rato sintiéndolos como agujeros en su propio pecho. Sintió frío, sintió un
hielo muy similar al del sol de agosto sobre su cabeza y se abrigó con un
suéter color invierno. Se preguntó si alguna vez esas fotografías volverían a
ella, si encontrarían el camino de regreso… sin embargo, una nueva pregunta le
disparó en la sien esparciendo sus convicciones por la habitación, ¿Quería realmente que volvieran? - La respuesta negativa que
brotó de sus entrañas, la llevó a levantar el mentón, comprar cuadros de Guns N Roses y colgarlos como
sustitutos. Juntó las ventanas sin olvidar cerrarlas por dentro.
lunes, 12 de agosto de 2013
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2 comentarios:
Hace unos años perdí todas las fotos que tenía en formato digital, y sentí rabia; mi madre guarda fotos antiguas en papel, y amenaza con difundirlas para darme más rabia aún. Mi memoria es más fuerte.
Un beso
Juan M
Gracias, Juan Manuel por tu comentario. Me da gusto saber que tu memoria rescate esos hermosos momentos significativos para ti. No muchos hacen eso.
Un beso!
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